El Higo
Los Beneficios Del Higo
Ayuda a reducir la presión arterial elevada
El alto contenido en potasio ayuda a reducir el riesgo cardiovascular, así como la presión arterial, sin embargo, un consumo excesivo y en determinadas personas puede agravar algunas dolencias.
Fuente de energía
Los higos son una buena fuente de azucares naturales que ayudan a incrementar los niveles de energía y mejorar el estado de ánimo.
Comer higos frescos o secos cada mañana nos ayuda a combatir el cansancio y así poder comenzar el día de la mejor mantera posible.
Tiene Efecto laxante
Los higos, tanto frescos como secos, incluso las brevas (fruto de la higuera que maduran en primavera y se recogen en los primeros meses de verano) tienen un alto contenido en fibra. Cada 100 gr contiene 2,5 g que favorece el tránsito intestinal. Las semillas del fruto ingeridas ayudan a la eliminación de toxinas que se acumulan en nuestro organismo. Por tanto, se puede considerar al higo uno de los mejores alimentos para combatir el estreñimiento.
Aporta antioxidantes
Los higos ayudan a prevenir el envejecimiento prematuro y también ayuda a mantener la salud de todos los órganos y sistemas.
Evita la anemia
Los higos ayudan a reducir y prevenir la anemia gracias a la cantidad de hierro que posee
Normalmente hay cierta dificultad para que nuestro organismo asimile el hierro proveniente de cierto vegetales y por ese motivo es necesario acompañar la ingesta de higos con frutas ricas en vitamina C.Es posible que haya que recurrir a otro tipo de alimentos si el problema de la anemia es importante, ya que con los higos no tienes asegurada la solución!
Es un antiinflamatorio natural
Los higos pueden servir como remedio casero para aliviar la inflamación y reducir los dolores provocados por reumatismos, artritis, abscesos, ulceras y cualquier otro tipo de inflamación.
Se recomienda aplicar el higo fresco sobre la zona afectada para reducir inflamaciones cutáneas de manera sencilla y natural.
Contribuye con la pérdida de peso
Los higos aportan glucosa, fructosa y sacarosa que son azucares naturales que no perjudican a la salud. La ingesta de higos puede ayudar a reemplazar los postres y antojos sin hacer demasiado esfuerzo, ya que los azucares que contiene permiten calmar el deseo de dulce.
Reduce el riesgo de problemas cardiovasculares
El higo es una fruta que ayuda a mantener fuerte el corazón gracias a su contenido en Vitamina A, Omega 3 y Omega 6.
El higo es rico en un compuesto llamado Pecina, que ayuda a reducir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, Tensión arterial, así como a controlar los niveles de colesterol malo (LDL) por su alto contenido en potasio.
Protege contra la degeneración macular
Según algunas creencias el consumo regular de higos dentro de una dieta equilibrada previene la degeneración macular y otros trastornos oculares que afectan de manera especial a mayores de 60 años. Por este motivo se recomienda un consumo de 2 a 3 raciones al día.
Ayuda a prevenir la diabetes
El higo es un alimento que contiene azucares naturales sin embargo las personas que lo consumen con regularidad presentan niveles de azúcar en sangre más controlado frente a los que no lo consumen.
Las personas diabéticas deben consultar a su médico antes de incluir el higo en su dieta
Efectivo en tratamientos de boca y piel
Tradicionalmente se ha usado el higo por nuestras abuelas porque consideran que servía para fortalecer las encías, combatir la gingivitis y los abscesos dentales.
También se han usado los higos en tratamientos para la piel, aliviar infecciones y eczemas y en tratamientos estéticos ya que los ácidos omega 3 y omega 6 nutren el cutis seco, aclaran la piel y le dan brillo.
Alimento muy adecuado durante el embarazo y la lactancia
Debido a su contenido en ácido fólico, calcio y magnesio, ayudará a los más pequeños a crecer correctamente, además del aumento de nutrientes que compartiremos durante la lactancia.
Huesos fuertes
El calcio junto con el fósforo ayudará a tener unos huesos más fuertes y sanos.
Cura las verrugas
La savia de la higuera, también conocida como látex, es, tradicionalmente, una cura contra las verrugas.